Two-thirds carignan and one-third garnacha) Vivid red color. Spicy red berries and cherry on the nose, with suave nutmeg and cinnamon adding complexity. Light-bodied, fresh red fruit flavours reminded me of pinot noir, as did the silky texture and fine-grained tannis. Clean and understated, with good finishing sweetness and no rough edges. This is drinking nicely right now.

Toast and chocolate oak notes frame blackberry and plum fruit in this polished red. Supple and lively, with firm tannins and a smoky, spicy finish. Expressive. Carignane, Grenache, Syrah and Cabernet Sauvignon. Drink now through 2012.

Is a red wine made 100% from carignan grape variety. Fermented in French oak tanks (15 Hl) and aged in fine grained French oak barrels during 18 months. Bottled unfined and unfiltered in order to preserve its organoleptic qualities. Selecció Especial is fresh, depth, mineral, fruit and elegant

Ferrer Bobet basa su filosofía de trabajo en el respeto. Respeto por la larga tradición vitivinícola de Priorat, respeto por el desarrollo económico y social de esta escarpada y austera comarca rocosa del sur de Cataluña y respeto por los amantes del vino que buscan un Priorat que refleje con pureza y armonía la esencia mineral tan propia de estas tierras. El vino presenta notas de toffee, tostaos de la barrica, ahumados, tabaco dulce de pipa e incienso. Es muy elegante. En boca es redondo, goloso, jugoso, amplio, noble y de buena acidez. Carnoso con mucho peso de fruta.

Cuando parecía que ya habíamos visto todo lo que podía dar de sí el Priorat, aparecen Sergi Ferrer-Salat y Raül Bobet para demostrar que aún nos queda mucho por beber y disfrutar. Su proyecto en el Priorat no deja indiferente a nadie. Y emociona porque está concebido desde el respeto: al carácter de esta tierra, a sus gentes y el entorno medioambiental.¿Y esto cómo se bebe? En dos tintos -uno de ellos es el Ferrer Bobet 2005, Vino del Año en los Premios Sibaritas 2009- que son el fiel reflejo líquido del perfil mineral que destilan las terrazas escarpadas de lIicorella y de las viejas viñas de garnacha y cariñena que hacen equilibrio en estas pendientes.Pero como Ferrer y Bobet no se miran el ombligo, también apuestan por ir más allá del respeto a la tipología de estas uvas y estas tierras y contar algo más que lo que cuentan los prioratos al uso. Para ello, buscan nuevas voces que armonicen con el conjunto y completan la orquesta con pequeños porcentajes de cabernet sauvignon y syrah, apenas una muestra de lo que darán de sí estas cepas en los vinos de la bodega cuando las jóvenes viñas entren en producción. Eso sí: los socios se comprometen a no plantar ni una hectárea más de viñedo, toda una gallardía en honor a la biodiversidad del paisaje, sobre todo considerando que la finca cuenta con 70 hectáreas de las que la viña ocupa apenas 22. Dicho esto, sobra apuntar que Ferrer Bobet se ha abocado a la viticultura orgánica, con el convencimiento, además, de que todo gran vino nace de un buen cuidado del viñedo. El minucioso diseño de la bodega se ha llevado a cabo, justamente, para mimar en toda regla a la materia prima nacida de esa rigurosa viticultura. Así es como este Ferrer Bobet 2005 -la cuvée genérica de la flamante bodega, todo hay que decirlo- ha fermentado en pequeñas tinas de madera y madurado durante doce meses en barricas de roble francés, nuevas y de segundo año.De todo ello nace seguramente la frescura que ha seducido a los jurados de los Premios Sibaritas y que de alguna manera se desmarca de la mayor parte de los tintos del Priorat, que suelen abundar en una madurez casi excesiva y están sometidos a crianzas más largas. Por el contrario, el Ferrer Bobet 2005 ha conseguido balancear la madurez con la frescura, la nobleza con la suculencia y la pasión con la elegancia. No está mal para un debutante...

Cariñena 53%, Garnacha 35%, Syrah 7%, Cabernet Sauvignon 5%. Color cereza oscuro. Aroma expresión frutal, mineral. Boca dulcedumbre, sabroso, tostado, taninos suaves.

La flamante bodega Ferrer Bobet es uno de los proyectos más interesantes de cuantos han surgido en el Priorato en los últimos años. Sus primeros vinos atesoran una calidad que invita a soñar con grandes logros en el futuro. El tinto Ferrer Bobet 2005 –el más sencillo de la gama-, da protagonismo a la variedad cariñena (53%), secundada por garnacha (35%), syrah (7%) y cabernet sauvignon (5%). Es un vino noble, suculento y complejo, rico en aromas minerales y de fruta roja madura y elegante en el paso por boca. Sin duda, un magnífico primer paso.

Bodega de reciente creación que sale con un vino 2005 elegantísimo, firme y muy bien trazado. Hay equilibrio, sabor, redondez, madurez y frescura al mismo tiempo y deja un enorme y grato recuerdo final. Buen proyecto por lo que se intuye a simple vista, y buen enfoque de elaboración moderna y respetuosa.